13.12.11

Calle 13. Reflexiones sobre coherencias, prejuicios y rebeldía.

Se me ocurren varias cosas si me pongo a pensar en lo que ocurrió con Calle 13 hace unos días, cuando llegaron 5 horas tarde a un recital en Perú. Sobretodo porque fue un hecho disparador, del que se desprendieron varias consideraciones televisivas que mezclaron realidades, para "analizar" lo ocurrido.

Lo primero que se me ocurre -no sin antes aclarar que los motivos de la tardanza son notables, honorables, dignos- a la luz de las opiniones de los opinólogos, es preguntar: ¿quién carajo puede tirar la primera piedra a la hora de exigir coherencia utópica o tirarsela de superado al declarar que René y el Cabra y Calle 13 son "rebeldía cool" o "se hacen millonarios con la rebeldía"? ¿Acaso importa si lo que hacen, lo que dan, lo que entregan, lo que representan, a los que representan, les permite a la banda hacerse de un buen dinero?

Funcionan bien los prejuicios burgueses que nos supieron meter en la cabeza durante ya diria siglos: si son rebeldes, tienen que ser unos hippies -el estereotipo de las clases dominantes del caso-, sin posesiones materiales, sin dinero. Unos tirados, a los que les exigimos precisamente las cosas que jamás nos exigimos a nosotros mismos. ¿Para cuándo empezar a interpelar el orden de las cosas que naturalizó a tal extremo que los hijos de puta, que los codiciosos, que los racistas, que los asesinos de multitudes, que los inoperantes, que los especuladores, que los que NADA NOS DAN, los que en nada nos ayudan a que pensemos, a que conozcamos la realidad, los que jamás se la jugaron por ser la voz de los que JAMÁS tuvieron voz, sean precisamente los millonarios? ¿Para cuándo empezar a pensar así? La cabecita del argentinito medio pelo pedorro hace que en lugar de meterte contra las lacras de la sociedad que ostentan fortunas en muchos casos fraudulentas, sea más "relajado" hacerse el loquito e injuriar a René, al Cabra, a Calle 13 "porque se la tiran de rebeldes y son millonarios".

Sin que me importe un carajo sin son millonarios o no, rebeldes sí que son. Ponete a leer, a ver videos, a escuchar las cosas que dicen en los lugares en dónde las dicen, y atravete a decirme que eso no es rebeldía. ¿Qué tendrán contradicciones, paradojas en sus accionares? PERO CLARO, PAPANATA. ¿CONOCÉS ALGÚN SER HUMANO QUE NO LAS TENGA? ¿QUÉ QUERÉS? ¿ARGUMENTAR POR FUERA DE LA NATURALEZA HUMANA PARA SENTIRTE GROSSO Y "ANIMARTE" A "DESENMASCARAR A ESTOS QUE SE LA TIRAN DE REBELDES"? Ojalá el grupete de criticones sin conocimiento hiciera -porque en la vida la cuestión, al final, es hacer más que decir y pensar- decía, ojalá el grupete de criticones sin conocimiento ni cultura ni coraje hiciera el 10% de lo que estos muchachos ya han hecho.

Después está la bajada de línea, los que intentan apropiarse de su mensaje, etc. Yo, que algo conozco de Calle 13 ya que ya en 2005 me lo hizo escuchar mi amigo el Polaco, sé que son tipos a los que no podrías encuadrar, adoctrinar. A lo sumo les podrás decir "izquierdistas", y estarías en lo correcto. Que los pobres seres humanos que están en Gran Hermano hayan dicho, según ví, "Ojo que Calle 13 es kirchnerista", ¿debería sacarnos tiempo en nuestra exposición? Quizás sí, porque prejuzgo mal y considero, no sin lamentarme, que deben haber muchos estúpidos capaces de lanzar esa simplificación tan televisiva, tan de estos tiempos.

Porque ¿qué pasa? ¿Qué vieron? Cierto, salieron en 6,7,8 el año pasado, los del programa hablan de ellos, usan sus cortinas musicales, son defensores de René, del Cabra, etc. Por tanto, Calle 13 es Kirchnerista. Siento pena, vergüenza al tener que desmenuzar esta estupidez, pero bueno. Que Calle 13 haya conocido varias de las cuestiones realizadas por el gobierno en estos ultimos años y las haya celebrado no seria ninguna sorpresa. Igual que lo hago yo en el programa, porque ante todo trato de ser lo más coherente posible con mis ideas, con mis ideales, con mis convicciones. De ahí a ser oficialista, cortesano del poder, un orgánico que no critica, hay miles de años luz, creeme. Y decir que una banda de puertorriqueños, a esta altura ciudadanos del mundo -de latinoamerica más que otra cosa- sea "K" es, al menos, una idiotez de proporciones inconmensurables.

Que 6,7,8 o TVR hagan uso de Calle 13 en las cuestiones en las que salen bien parados, es algo claro. Pero Calle 13 es otra cosa. René parece ser otra cosa. René es el que se reúne en facultades de Buenos Aires a hablar con la izquierda, con el Partido Obrero, con el Cabra de Las Manos de Filippi, y eso es así, aunque vos no lo veas en los medios. En ninguno. René es el que habla de Mariano Ferreyra -asesinado básicamente por el sostenimiento de una burocracia sindical que este modelo de país no ha erradicado-, el que pide justicia por los pobladores originarios asesinados -por culpa de los agronegocios, guste o no parte fundamental de este modelo K-, el que escribe letras que dicen "la tierra no se vende" y se escucha en un país, el nuestro, en el que -sólo para poner un ejemplo- mineras transnacionales están saqueando, contaminando e hipotecando el futuro de miles de compatriotas.

Reducir todo al título de un zócalo televisivo, injuriar desde posiciones al menos sospechosas, exigir lo que no se exije ni a palos en la vida personal, son los caminos trazados. Son los símbolos de nuestro tiempo. Son los caminos fáciles, los que justifican nuestra "nada" existencial. Los que permiten que un par de patéticos seres humanos en Gran hermano, un par de seres "pensados" -a los que les han ahorrado la dificil labor de pensar por si mismos- digan "Calle 13 es kirchnerista".

"La rapidez es enemiga del pensamiento". Por eso los que hablan sobre lo que "dicen que dicen que andan diciendo", son tajantes y no dan lugar a la reflexión.

"La rapidez es enemiga del pensamiento". Por eso estas palabras. Por eso este saludo a Calle 13, desde Rosario, Argentina.

¡Un abrazo, saludos, fuerzas y felicitaciones!

Santiago Grandi.

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