Easy Rider (traducida acá como "Busco mi destino") es un clásico del cine protagonizado por Peter Fonda, Dennis Hooper y la excelente actuación de Jack Nicholson. Ayer a la noche la vi por primera vez completa y me quedaron las ganas de recomendarla y escribir algo más al respecto.La película, filmada en 1969, ejemplifica de manera brillante el sentimiento que caracterizó a toda una generación: la de los jóvenes de los 60. Quizás lo que más me gustó es que no recurren a trilladas situaciones para ello, sino que simplemente con ver las actitudes, las poses, las palabras de Fonda y Hooper (los dos protagonistas centrales) uno realmente puede entender cuales eran las sensaciones y los anhelos que tenian esas personas en aquellos revolucionarios años.
Al respecto, recomiendo prestar especial atención al mini "discurso" que da Jack Nicholson en poco más de la mitad de la película, en el que, porro de por medio, asegura que el temor que la libertad genera en la gente ordinaria y conformista puede llevar incluso a matar. Los mensajes, como dije, inundan Easy rider, pero quizás en este segmento del gran Nicholson quedan expuestos de una manera más evidente, acertada... magnífica.
En fin, creo que Easy rider es una película que toda persona con deseos de conocer más de cerca a los estereotipados "hippies" debería ver. Y para el que ya sabe de raíz los deseos de aquella generación, es todavía una propuesta más interesante. No sólo por lo monumental de las actuaciones de Fonda, Hooper y Nicholson, sino también por lo acertado de su mensaje, incluyendo su metafórico final.
Por Santi Grandi & Chueco García.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario