Posibilidades

Las posibilidades están, lo que falta son las ganas de utilizarlas. Más fácil es quedarse sentado haciendo lo que te dictan desde arriba. Hace mucho tiempo un conocido tiró esa frase (no precisamente esa, pero es la idea), y ahora con los años le encuentro el sentido.

Sea por el motivo que sea, una gran cantidad del tiempo con el que contamos es decididamente desperdiciado. Entendamos esto: una suerte de aburrimiento constante que poco tiene que ver con el necesario descanso y despeje mental al que todos debemos tener la oportunidad de acceder. Estamos al pedo, aburridos, sin nada que hacer, pero esto lejos de mantenernos tranquilos (seria raro de todas maneras que pudiesemos estarlo sin entrar en acción), nos tiene angustiados.

Las formas de evitar este estado tedioso podrían estar emparentadas a hacer el esfuerzo para poco a poco empezar a consumar aquello que anhelamos hacer. Aquello que queremos ser. Claro, habrá trabas. Desde luego, son necesarias. De lo que se trata es de entender que, quizás, una gran parte de las veces los impedimentos poco tendrán que ver con la realidad, y mucho tendrán de ideas instaladas, convenciones que nos dicen que de nada sirve probar.

Entonces empieza la cosa. Hace rato empecé a creer que las posibilidades están todas ahí, alrededor, y que es uno mismo el que las toma o las deja pasar. Claro, todo tiene sentido si pensamos simplemente en el nombre de nuestro programa. "Está en vos"; uno decide, ¿uno es lo que quiere ser? Sí, sostengo que sí.

En este sentido hay que aclarar que sabemos, valoramos y adoramos la posibilidad que tenemos de poder sentarnos tranquilos a pensar, a hablar, a imaginar, sabiendo que comida vamos a tener, que abrigo vamos a disfrutar. Entendemos (el que nos escucha lo sabe bien) la enorme cantidad de privaciones que este sistema de mierda esparce a un número cada vez más grande de seres humanos, y peleamos a nuestra manera para hacerle frente a esto. Sin embargo, tratamos de evitar lajustificación.

Somos ante todo una posibilidad, y en ese sentido vivimos ante la paradoja de habitar un mundo que a la vez que se ha transformado en uno más "libre" en una gran cantidad de factores, sumerge en la más cruda de las pobrezas humanas a una cantidad bochornosa de personas. Ese mismo sistema mundial que aniquila, desnutre y asesina, nos abre más puertas hoy que hace 30 años, por más que los adherentes del "todo tiempo pasado fue mejor" hagan sus máximos esfuerzos en contrarrestar esta irrefutable verdad.

Sigo pensando que las posibilidades están ahí, y que todos, por el motivo que sea (más entendible o menos entendible, si queremos decirlo de alguna manera) nos distraemos, perdemos nuestro enfoque, y dejamos pasar el tiempo. Como si nuestra existencia fuese infinita, como si cada segundo que vivimos tuviese su suplente.

Noticia: no es así. Cada segundo que pasa, es uno menos que viviremos. Afrontar esto, lejos de ser angustioso, es lo mejor que nos puede pasar. Encarar la situación nos permitirá ponernos en acción, y eso llenará de sustancia nuestros días. ¿Habrá algo mejor?

Por Santi Grandi & Chueco García.