* Hace 95 años nuestro país era bastante distinto visualmente al actual, pero bastante parecido si tenemos en cuenta ciertas relaciones económicas.
Por esos tiempos las cuestiones eran mas fáciles de ver de lo que son ahora. La parte rural del país estaba en su gran mayoría (millones y millones de hectáreas) en manos de un pequeño número de terratenientes, estos las habían recibido desde el momento mismo de la independencia del país hasta la “conquista del desierto”.
¿Qué pasaba? Ellos eran los dueños, poco hacían para merecer esas tierras, pero mientras, mantenían a los arrendatarios (quienes las trabajaban) en condiciones semi-serviles. Los condicionaban por todos lados: les cobraban altísimo el arrendamiento de las tierras, los obligaban a comprar los insumos y las herramientas en determinados lugares (obviamente cobrándoselas mas caro de lo que en verdad salían), los forzaban a hacerse cargo de las pérdidas y les compraban lo producido a precios ínfimos. Los obligaban a endeudarse cuando empezaban a trabajar (eran inmigrantes que habían venido sin nada, solo tenían su fuerza y su cabeza) y de esta manera los tenían sometidos a su voluntad ya que ni siquiera trabajando de sol a sol podían pagar sus deudas.
Después de esta reseña contextual, ahora viene lo que queremos resaltar, los colonos tenían todo en contra: propietarios, autoridades, policía, poco dinero...todo. Así, el 25 de junio de 1912 los peones rurales de la ciudad de Alcorta se cansaron de que se las metan y se las saquen y salieron a decir BASTA. Basta de que sean ellos los que laburen y otros los que la junten en pala, Basta de tratar a los trabajadores como si fueran animales, Basta de tener la vida hecha y seguir oprimiendo por placer...Les exigieron a los propietarios mejores condiciones laborales, no les dieron bola, entonces comenzaron un paro agrario que duró mas de tres meses, y al que rápidamente se plegaron chacareros de toda la pampa argentina. Se formó una gran cantidad de asambleas en donde los chacareros discutían las acciones a tomar, en donde se aprendió el valor de la solidaridad, en donde se dejó de lado la lucha individual para descubrir la pasión de luchar colectivamente. Todo esto condujo a la creación de distintas federaciones gremiales rurales a lo largo del país, la mas importante de ellas fue la Federación Agraria Argentina que debía hacerle frente a la aristocrática Sociedad Rural. Más allá de las reivindicaciones conseguidas esto fue lo más importante, la piedra fundamental de cualquier reivindicación futura, fue el primer paso que se dio en la historia argentina para corregir las relaciones de propiedad rural imperantes en nuestro país. Pensemos; tenían todo en contra, el sistema los acostumbraba a vivir pobres e indignos, sin embargo no fueron escépticos con respecto sus ganas de algo mejor, esos fueron sus ideales, fueron idealistas (palabra tan denostada por estos días) ...y deciles que no les sirve luchar.
¡Que bueno sería buscar esa conciencia perdida!
Este es el homenaje de Está en vos! a los valientes que gritaron bien alto. Quedémonos con la frase de un periodista al que admiramos: “Ser rebelde hoy en día es sinónimo de salud mental”.
*Idea: Flor Becat
Posteo de Santi Grandi & Chueco García.
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