3.7.07

A 5 años de la masacre de Avellaneda

Hace 5 años, un 26 de junio de 2002, miles de piqueteros se movilizaban hacia el Puente Pueyredon con intención de cortar el tránsito. El país estaba inmerso en la peor crisis de su historia. El presidente era Eduardo Duhalde. Los organizaciones reclamaban un aumento de los subsidios de $150, monto que nunca se modificó, y la implementación de un plan alimentario bajo gestión de los propios desocupados. ¿Delincuentes encapuchados amantes de la violencia? Creemos que no. Ese día pareció destaparse una olla que no olia para nada bien. Las manifestaciones sociales eran un dolor de cabeza para Duhalde, así que se buscó criminalizar la protesta. Junto con mentes siniestras planificaron un plan represivo que termine con sangre, para luego culpar a los manifestantes de ser bestias salvajes que se mataban entre ellos. El desenlace de ese día ya es conocido: Maximiliano Kosteky y Dario Santillán quedaron acribillados en el piso de la Estación Avellaneda. Hasta ahí todo marchaba bien para la estrategia del gobierno. Al otro día Clarín mentía en sus titulares y de esta manera iba tomando forma la imagen de piqueteros- asesinos. Pero la mentira duró poco, unos días más tarde se hacía pública la secuencia de fotos en la que se vei claramente como los manifestantes eran fusilados por el comisario Franchiotti (miembro de la policía bonaerense), que usó munición gruesa y NO balas de gomas. La mentira planeada se desplomaba, ni el mas reaccionario de los argentinos podía negar la masacre, y en consecuencia Duhalde se veia obligado a adelantar las elecciones (hasta ese momento con fecha incierta). Las movilizaciones piqueteras se multiplicaban y obligaban a que el 9 de enero de 2006, después de un extenso juicio se condene a prisión perpetua al comisario Franchiotti y al cabo Acosta. Sin embargo estos dos personajes son los típicos condenados que sirven para conformar a la gilada y hacer creer a la opinión pública que la justicia actúa. Hoy, a 5 años de los sucesos, la causa que investiga a los responsables políticos marcha camino al archivo. A pesar de la evidencia que existe contra la SIDE, las declaraciones de Atanasof y de Juan Jose Alvarez, ninguno de ellos fue ni va a ser citado a declarar. Para colmo el comisario Franchiotti tiene diversos privilegios en Penal de Olmos, entre otras cosas está en un sector Vip de la carcel, tiene celular no numerado y goza de un extendido régimen de visitas. Mientras todo esto pasa, la gran mayoría de los argentinos, haciendo gala de su estrechez de pensamiento, no deja de demonizar a los movimientos piqueteros. Gran contradicción: NUNCA se olvidan del repudio que les tienen a aquellos que cortan sus calles, a esos "criminales inventados", mas conocidos como piqueteros; PERO SI se olvidan de los grandes criminales, aquellos a los que no les hace falta ensuciarse las manos pero que con una simple decision, vacía de sensibilidad social, pueden dejar en la calle, en el cementerio, o en donde sea a miles de personas, todo por el simple hecho de incrementar su cuenta bancaria. Así, pasan los años y seguimos votando a quienes sabemos son criminales con cara de buenos, un perfecto acto del doblepensar. Podríamos, aunque sea de vez en cuando, dedicarnos a mover las neuronas, a derrumbar ese muro de hipocresía y evaluar como son las cosas. Así podríamos pensar qué tal sería un país gobernado por piqueteros. ¿Vos decís que Peor? Lo dudamos.

Posteo de Santi Grandi & Chueco García.

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