6.7.07

Seguimos torturando...¿No aprendimos nada?



En el mundo, en pleno siglo XXI, con los avances tecnológicos que tenemos, con la globalización en su máxima expresión y demás, hay todavía al menos hasta 102 países que siguen registrando casos de tortura y malos tratos en manos de fuerzas de seguridad y otras autoridares del Estado.
Esto es lo que dice el Informe Anual 2007 de Amnistía Internacional que calificó de "preocupante" que "no todos los países tomen medidas para erradicar todas las formas de tortura patrocinadas por el Estado".
Miembros de la entidad aseguran que algunos países, "cierran los ojos o permiten que otros países la practiquen en su nombre" y otros "incluso la están fomentando", cosa que lamentablemente nos resulta fácil de creer.
Para poner ejemplos a la situación Amnistía Internacional ha registrado casos de tortura y malos tratos en Estados Unidos, Argelia, Egipto, Marruecos, Irak, México, Rusia, China, Brasil, Zimbabwe, Afganistán y muchos otros países" . Desde ya, el uso de la tortura nunca está justificado, no importa cuáles sean las circunstancias por lo que la comunidad internacional debe oponerse frontalmente. Claro que si dentro de los países torturadores se encuentra el juez del mundo como cree serlo EEUU, es difícil que la comunidad internacional realmente se oponga a estas prácticas. Es como un choque de intereses para el país del norte, ¿no les parece?
Claro que es así, y por eso entre las cosas que publicó Amnistía se encuentran las denuncias en América, donde el primer lugar se lo lleva precisamente Estados Unidos. Abusos sistemáticos y reiterados por parte de este país y sus aliados en el contexto de la "guerra contra el terrorismo" ocupan un interesante lugar en el informe anual. La organización menciona, en este sentido, las detenciones secretas, las desapariciones forzadas y la reclusión arbitraria y prolongada en régimen de incomunicación.
También se denunció que México sigue practicando la detención arbitraria, los malos tratos, la tortura y la vulneración del derecho al proceso debido de presuntos delincuentes. Con esto nos damos cuenta que las prácticas de este calibre no son sólo propiedad de la tierra de George W.
Y para no olvidar la situación en Latinoamérica en general, el informe hace referencia a las condiciones infrahumanas en muchas cárceles de este lado del continente.A millones de seres humanos, los beneficios de siglo XXI parece que no los contienen. Es más, creemos que deben sentir que siguen viviendo en el XIX o hasta en el XVIII. De qué valen los avances tecnológicos si como personas no hacemos más que retroceder ¿se lo han puesto a pensar realmente alguna vez?

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