¿Todo un teatro montado?

Parece que en los últimos tiempos la Presidenta de la Nación se ha dedicado a inaugurar cosas que ya han sido inauguradas, o centrales que aún hoy no han empezando a funcionar. En efecto, en marzo pasado Cristina Fernández estuvo presente en la apertura oficial de la central termoeléctrica Manuel Belgrano, en Campana. El pequeño asuntito es que la usina todavía no funciona y, por si fuera poco, en aquella ocasión se montó un importante acto en el que hasta existió el ficticio ruido de motores funcionando. Una excelente puesta en escena en un momento clave, en que comenzaban los problemas de los que todos tenemos registro en estos últimos dos meses.

Por su parte, durante esta semana, Cristina inauguró en la localidad de Puerto Tirol, en Chaco, la empresa textil Santana. El asunto en este caso es que el emprendimiento ya habia sido inaugurado en Diciembre pasado. Claro que, en esta ocasión, lo que acotenció fue la apertura de una nueva parte de la obra, un nuevo tramo de la planta.

Con esta noticia se pueden hacer varias miradas y pensar que se trata de un claro intento de cierto periodismo (Diario Perfil en este caso) que quiere encontrarle siempre algo para achacar a la figura presidencial, siendo en este caso un argumento válido. La cuestión son ciertas palabras de la Presidenta en el acto ("Quiero decirles que hoy estamos protagonizando un día histórico porque acabamos de inaugurar la fábrica textil más moderna del mundo"), y el hecho de que en la agenda presidencial haya aparecido efectivamente como "inauguración" (como también en los titulares de muchos medios) En definitiva, poco se hizo para aclarar que se trataba del acto de una pequeña apertura, y sí se utilizó para beneficiar la alicaida figura de Cristina. Otro de esos actos usados como plataformas montadas en los que sólo importa mostrar a una Presidenta activa y trabajadora, luchadora y confrontativa, que dependiendo del momento y el lugar elije conciliar con sus palabras.

De ser efectivamente ciertas estas noticias, alguien - del gobierno -deberia salir a aclarar las cuestiones. Porque que inauguraciones devenidas en actos políticos pasen a ser parte de espectáculos en dónde lo que ocurre es lisa y llanamente un teatro montado para aprovechar la ocasión, no es joda. Por el contrario, es mentir. Es no poder parar de mentir y engañar.

Por Santi Grandi & Chueco García.